Las Áreas de Actividad Económica, como muchos polígonos industriales de nuestras ciudades, deben readaptarse a un nuevo modelo económico (Economía del Conocimiento). Sin embargo las empresas pueden acometer algunos cambios, pero es un papel de las Administraciones Públicas el promover acciones concretas para implementar cambios que no están necesariamente integrados en los procesos productivos: actuaciones medioambientales, sociales, urbanísticas y culturales. Achievements: Los socios ZonE 31-64 celebrarán el próximo 28 de noviembre la jornada de clausura de este proyecto europeo que en los últimos tres años ha supuesto el desarrollo de trabajos de investigación, estudio, planificación, ordenación y reactivación de Áreas de Actividad Económica (AAE) del Pirineo Occidental. Concretamente, de los polígonos industriales del Valle de Aranguren, en Navarra, y del Centre Européen de Fret de Mouguerre, en Aquitaine.El resultado más palpable del proyecto es la renovación de estos polígonos industriales. Sin embargo, el eje central de ZonE 31-64 ha sido siempre impulsar una metodología que permita revitalizar Áreas de Actividad Económica atajando el problema del abandono de algunas de sus zonas y edificios no solo desde un punto de vista urbanístico, sino también social, cultural y ambiental: Las obras y las inversiones en infraestructuras son lo más tangible pero para nosotros era tan importante, o incluso más, obtener una guía metodológica que ayudara a todos los agentes territoriales y económicos a reflexionar sobre las consecuencias de seguir actuando con un paradigma equivocado, exponen desde NASUVINSA, empresa pública del Gobierno de Navarra que ha actuado como jefe de fila del proyecto.Para los socios del proyecto, las principales conclusiones tras tres años de investigación y transferencia de conocimientos son cinco:- Las empresas de un Área de Actividad Económica (AAE) forman parte de una auténtica comunidad de vecinos que comparten problemas y oportunidades y que por ello necesitan incrementar sus niveles de organización y administración interna.- Deben promoverse las Comunidades Industriales Organizadas (CIO) en las AAE como instrumentos de gestión mancomunada y de colaboración público-privada. Las administraciones públicas tienen en este apartado un papel significativo para impulsar el trabajo en red a lo largo y ancho del Pirineo.- Generalizar el uso del concepto Territorio indusLAN para definir espacios activos industriales promotores de empleo donde la adaptación a la nueva economía es posible y que por tanto se convierten en focos de atracción de actividades productivas.- El catálogo de AAE en Navarra, elaborado en el marco del proyecto, permitirá dirigirse a los responsables de los AAE con una visión estratégica y al mismo tiempo transferible a otras regiones.- Estos conceptos y acciones son imprescindibles para actuar de acuerdo a la tendencia de regeneración urbana. No consumir más suelo, sino mantener y reutilizar el existente.