El sector de automoción es un sector estratégico de la economía de la zona transfronteriza y los materiales plásticos (polímeros) suponen aproximadamente un 25% de los elementos de un vehículo. Los polímeros se emplean como sustitutos de elementos metálicos, lo que permite incrementar la ligereza de los vehículos, contribuyendo, en consecuencia, a una reducción de las necesidades de consumo energético. Sin embargo, la mayor parte de los polímeros empleados actualmente en el sector proceden del petróleo. El presente proyecto pretende contribuir tanto a la reducción de la dependencia del petróleo como a la reducción del impacto ambiental de la producción de polímeros. Achievements: Los materiales plásticos (polímeros) suponen el 25% de los elementos de un vehículo. Estos polímeros se emplean como sustitutos de elementos metálicos, lo que permite incrementar la ligereza de los vehículos contribuyendo, en consecuencia, a una reducción de las necesidades de consumo energético. Sin embargo, la mayor parte de los polímeros empleados actualmente en el sector proceden del petróleo.El proyecto europeo BIOSOURCE-COMP nació precisamente para contribuir al desarrollo de compuestos poliméricos biodegradables y de origen renovable que puedan ser utilizados en la fabricación de piezas estructurales de automoción (principalmente pedales para turismos) y reducir así la dependencia del petróleo y el impacto ambiental del sector.El centro tecnológico Leartiker acogió el pasado 17 de diciembre el acto de clausura de este proyecto. La ponencia ’Design, manufacturing and characterization of composite polymers derived from biodegradable resources, for automotive applications’ sirvió para exponer las fases de evolución de este proyectos y sus principales resultados.Los biocomposites desarrollados durante esta experiencia de cooperación transfronteriza se basan en mezclas de Poliácido Láctico (PLA) y fibras de lino y cáñamo como refuerzo, de forma que se han ajustado las concentraciones de los compuestos y se ha mejorado el comportamiento de los mismos siguiendo diferentes estrategias de compatibilización.Los biocomposites seleccionados se han fabricado a escala industrial, para su posterior procesado en el proceso de inyección de cara a la fabricación de pedales de embrague de un turismo.El consorcio de este proyecto europeo, liderado por Leartiker, ha estado compuesto por APESA (Pau, Francia), la Université de Pau et des Pays de l’Adour (UPPA), IPREM (Pau, Francia) y la Facultad de Química y Instituto de materiales poliméricos (POLYMAT) UPV/EHU-Polymat (Universidad del Pais Vasco). El proyecto ha sido financiado con fondos FEDER a través del Programa Operativo de Cooperación Territorial España-Francia-Andorra (POCTEFA 2007-2013).